Los Shakers fueron una comunidad cristiana utópica estadounidense fundada en el siglo XVIII por el inglés Ann Lee. Esta comunidad fue conocida por su sencillez, su honestidad y su devoción a la fe cristiana. La comunidad se caracterizaba por su simplicidad, su estilo de vida común y su devoción al trabajo. Los Shakers también fue conocidos por sus contribuciones innovadoras a la agricultura y la industria. La comunidad creó una variedad de productos de calidad que se comercializaron a nivel nacional, incluyendo tejidos, herramientas, muebles, alimentos y otros productos. Los Shakers también desarrollaron nuevas técnicas de cultivo y diseñaron mejoras para la agricultura. Además, establecieron una serie de escuelas y programas educativos para la comunidad. Los Shakers también crearon una variedad de arte facturas, incluyendo muebles, objetos decorativos y dibujos. Estas artesanías se hicieron famosas por su belleza y la calidad de su trabajo.
El estilo Shaker es una tradición de diseño de interiores que se remonta a principios del siglo XIX, cuando un grupo de personas llamadas los Hermanos Shaker comenzaron a poner en práctica sus principios de simplicidad y honestidad en el diseño de sus muebles y objetos de uso diario. Esta filosofía se ha convertido en el estilo más conocido del paisaje americano y ha influido en la forma en que diseñamos nuestras casas y oficinas.
El estilo Shaker se caracteriza por la simplicidad de sus líneas y estructuras, los colores neutrales, los materiales naturales, la funcionalidad y la atención a los detalles. El mobiliario Shaker a menudo está hecho de madera, con formas simples y limpias. Las formas rectangulares eran comunes, así como los círculos y los cuadrados. El enfoque en la funcionalidad significa que los muebles tienen una apariencia ordenada y limpia, con un mínimo de ornamentación y adornos.
Los colores Shaker son generalmente neutros, con tonos suaves de grises, beiges y azules. Los colores más brillantes también se usan, pero generalmente como un punto de color en una habitación. Los accesorios, como las alfombras y los cojines, también siguen el esquema de colores neutros.
Los materiales naturales también son una característica clave del estilo Shaker. La madera es uno de los materiales principales, a menudo de una sola madera. También se usan materiales como la laca, el cuero y el vidrio. Los materiales naturales contribuyen a la apariencia limpia y sencilla.
El estilo Shaker es una forma moderna y práctica de diseño que se ha mantenido a lo largo de los años. Está caracterizado por la simplicidad, los colores neutrales y los materiales naturales. El énfasis en la funcionalidad hace que sea una opción popular para muchos diseñadores de interiores, ya que se adapta fácilmente a casi cualquier estilo de decoración.
El Shaker es un estilo de decoración interior que se origina del movimiento religioso conocido como shakers, que llevan su nombre. Esta corriente se desarrolló a principios del siglo XIX en el estado de Nueva York, y se caracterizó por un estilo de vida sencillo y humilde, siendo el minimalismo una de sus principales banderas. Esta forma de decoración se caracteriza por la simplicidad, la utilización de líneas limpias y rectas, la ausencia de adornos superfluos y la utilización de materiales naturales como madera y algodón. El estilo Shaker se caracteriza por su aspecto minimalista y elegante, con una paleta de colores neutros y tonos pasteles que aportan una sensación de calma y tranquilidad.
Los muebles Shaker tienen líneas simples y rectas, sin adornos ni detalles superfluos. La madera es el material predominante para la fabricación de estos muebles, ya que los shakers tenían un gran respeto por la naturaleza y sus recursos. Esta madera se trata con aceites naturales para protegerla y darle un acabado suave al tacto. Las superficies suelen estar decoradas con motivos geométricos, como formas cuadradas y rectángulos, que se combinan con los colores pasteles para dar un aspecto relajado y moderno.
Los accesorios también tienen un papel importante en el Shaker. Los shakers solían tejer alfombras y colgarlas en las paredes para añadir textura y color a la habitación. Las lámparas de estilo shaker también son muy populares, ya que combinan madera y algodón para crear una sensación relajante. En general, el estilo shaker se caracteriza por su sencillez, líneas limpias y suave paleta de colores, para crear un espacio cálido y acogedor.