Un morillo de hierro es un elemento de acero empleado para unir dos o más piezas de una estructura o armazón. Está fabricado en forma de una pieza cilíndrica con una cabeza en uno de sus extremos. Esta cabeza es más ancha que el resto del cilindro, lo cual facilita la fijación de la pieza.
Los morillos de hierro son extremadamente resistentes, duraderos y pueden soportar cargas pesadas sin deformarse. Estos se utilizan comúnmente en construcciones, puentes, estructuras metálicas, maquinarias y estructuras arquitectónicas. Además, estos elementos son resistentes a la corrosión y a la intemperie.
Los morillos de hierro se fabrican en diferentes tamaños y espesores. Estos se seleccionan de acuerdo a la carga a soportar, la presión a resistir y la durabilidad requerida. Además, se pueden adquirir en acero al carbono, acero inoxidable, aleación de acero y otros materiales.
Los morillos de hierro se pueden encontrar en tiendas de ferretería, tiendas de suministros de construcción, tiendas de repuestos y en línea. Estos se suelen vender por separado o en paquetes que contienen varias piezas. Además, los morillos se pueden encontrar en diferentes acabados, como galvanizado, recubierto de zinc, anodizado y pulido.