El diezmo es un tema importante dentro de la fe cristiana y se refiere a la práctica de entregar una décima parte de nuestros ingresos a la iglesia. Muchas personas pueden sentirse confundidas en cuanto a cómo dar el diezmo, y es precisamente por eso que hoy te traemos una guía práctica que te ayudará a entender este tema y a dar el diezmo de acuerdo a los principios bíblicos.
1. Entiende el propósito del diezmo: El diezmo no es simplemente un impuesto que se paga a la iglesia. Más bien, el propósito del diezmo es reconocer que todo lo que tenemos proviene de Dios y por lo tanto, debemos ofrecer una porción de lo que recibimos de vuelta a él como una muestra de gratitud y confianza en su provisión.
2. Decide cuánto quieres dar: La décima parte es una cifra establecida dentro de la Biblia, pero no es una ley y cada persona puede decidir dar una cantidad diferente. Si eres nuevo en la práctica del diezmo, puedes comenzar por dar una porción realista de tus ingresos y luego ir aumentando gradualmente con el tiempo.
3. Dale prioridad a tu diezmo: El diezmo debe ser una prioridad en tus finanzas. Antes de gastar en compras innecesarias, asegúrate de reservar la cantidad que has decidido dar y luego organiza tus gastos en consecuencia.
4. Entrega tu diezmo regularmente: Es importante ser consistente en la entrega de tu diezmo. Si entregas tu diezmo de manera irregular, es posible que te sientas tentado a omitirlo en momentos difíciles o incluso a sentirte culpable por ello. Establece un ritmo y trata de mantenerlo fielmente.
5. Entrega tu diezmo con gratitud: El diezmo no es un acto mecánico de entrega de dinero. Es un acto de adoración a Dios y un reconocimiento de su provisión en tu vida. Entrega tu diezmo con un corazón agradecido y una actitud de gratitud.
Ahora que conoces los principios bíblicos para dar el diezmo, esperamos que esta guía práctica te haya sido útil. Recuerda que no solo es dar una parte de tus ingresos, sino es una manera de honrar a Dios y reconocer Su bondad y fidelidad en tu vida.